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Todo lo que el ministro del STF no quiso.
A Gilmar Mendes le gusta decir abiertamente que está en contra de las prisiones en Brasil.
El ministro del STF es flexible con casi todos los imputados, especialmente con los de Lava-Jato
Ahora imagínense la cara del ministro cuando se enteró de que:
La pena máxima de prisión en Brasil es de 40 años
Que los líderes de facciones criminales tendrán menos oportunidades de obtener progresión de pena y beneficios
Y que se puedan grabar las conversaciones entre presos y abogados o familiares.
